Los azukis son unas pequeñas alubias de color rojo-morado. Se denominan también “adukis” y vulgarmente suelen ser conocidas como “soja roja”. Su sabor se asemeja al de las alubias pero con un toque de dulzor.
Es un producto originario del Himalaya y muy consumido en China y Japón.
Tienen un alto valor nutritivo por contener muchos minerales, fibra y proteínas de alto valor biológico (pues poseen todos los aminoácidos esenciales).
Es la única legumbre con efecto alcalinizante, y combate la acidosis.
Contrariamente a lo que pueda parecer son de muy fácil digestión y no provocan flatulencias.
Tienen unos efectos terapéuticos fantásticos: tonifican el riñón, las vías urinarias y el corazón. Son diuréticas y desintoxicantes y tienen propiedades antiinflamatorias.
Ayudan a regular el buen funcionamiento hormonal gracias a su contenido en fitoestrógenos.
Cómo se cocinan
Es muy fácil:
- Se lavan para quitar el polvo, la suciedad y eliminar las saponinas (que son los antinutrientes naturales que contienen para protegerse de los depredadores y que hacen que disminuya su valor nutricional y que se dificulte su digestión).
- Se remojan durante toda la noche y después se desecha el agua de remojo
- Se llevan a ebullición con una proporción de 3 partes de agua por parte de azukis. Estarán listas en unos 40 minutos. Lo ideal es que hayan absorbido toda al agua de cocción pero si cuando ya están cocidas todavía les queda algo de agua, las escurres. Sabrás que están cocidas cuando queden tiernas y las puedas aplastar fácilmente al presionarlas con tus dedos.
- Opcional: en la olla de cocción pueden añadirse unos trocitos de alga kombu. Eso facilitará su cocción y le concederá un aporte extra de minerales. El alga kombu no le cambiará el sabor, ni la notarás.
- Añadir la sal al final, una vez ya estén cocidas puesto que así evitas que se reblandezcan y se deshagan durante la cocción.
Cuando mi amiga Asun, hace poco más de un año, me preguntó si sabía qué eran los azukis, jamás había oído hablar de esta maravillosa legumbre. Desde que las probé, es una de mis legumbres habituales y me parecen increíblemente ricas por su fino sabor y por su facilidad de digestión. En casa gustan a todos, incluso a los más pequeños. Es una alternativa fantástica a la tradicional, indigesta y flatulenta alubia.
Por todas sus propiedades fantásticas, os he querido presentar a las azukis, y espero que como me pasó a mi, sea para ti un auténtico placer conocerlas!
Saludos y buen provecho!!!