Elaboración: 15′ Personas : 4 Dificultad: Baja
Ingredientes:
- Arbolitos de un brócoli
- 1 cucharada sopera de miso (mejor sin pasteurizar)
- 1 rama de apio
- 1 cucharada sopera de mantequilla de almendras
- Un chorrito de zumo de limón
- 1 cucharadita de ajo en polvo
- 1 cucharadita de cúrcuma
- 1 litro de agua caliente a 40º
- Una pizca pimienta negra
Opcional: germinados de col lombarda (para decorar) y un chorrito de AOVE
Elaboración:
Lavar el brócoli bajo el grifo y cortarle los arbolitos y trocearlos.
Calentar 3/4 litro de agua a unos 40º y 1/4 de litro hasta el punto de ebullición. En el agua llevada a punto de ebullición diluiremos una cucharada sopera de miso.
Introducir en el vaso de la trituradora los arbolitos de brócoli y la rama de apio troceada añadir el resto de los ingredientes (excepto el miso diluido en agua). Triturar junto con los ¾ de agua hasta que quede una consistencia homogénea.
Después añadir a la mezcla triturada el vaso con el miso disuelto y que volver a triturar hasta que se incorpore bien con el resto ya triturado.
Servir y decorar con unos germinados y un chorrito de aceite de oliva virgen extra.
Es una crema crudivegana con unas propiedades nutricionales excelentes gracias a las bondades del brócoli, que como crucífera que es resulta un excelente protector de la salud, y del miso, que es pasta de soja fermentada que nos aportan bacterias probióticas beneficiosas para nuestra flora intestinal.
Si los crudos no te gustan o no te sientan bien, puedes elaborar la misma crema pero cociendo al vapor los arbolitos de brócoli y el apio. Se perderá algún nutriente pero seguirá siendo una opción muy saludable.
Buen provecho!